La bufanda o foulard es un elemento de moda super versátil y muy funcional que va con todo, además de resguardarnos del frío en estos días.
Pero no siempre sabemos cómo llevar esta pieza de abrigo o cómo sacarle el máximo partido. He ahí algunos consejillos para que tu vestuario aburrido cobre vida con esta sencilla prenda que puede hacer maravillas
Usa una bufanda colorida para tu outfit de tonos apagados o poco animados. Aprovecha la moda del print animal y escoge una con este estampado tan actual. También puedes optar por los tonos fucsias o azules, alegrarán tu cara y tu vestimenta.
Los de estilo palestino se suelen doblar por la mitad para formar un triángulo y luego envolverlo alrededor de nuestro cuello, siempre con el lado más ancho por encima del pecho con el triángulo mirando hacia abajo y los dos laterales enroscados en el cuello para que cuelguen también por delante o escondenrlos debajo, tal como muestra la imagen superior.
Otra opción es escoger una bufanda normal y corriente y envolver nuestro cuello con ella con tantas vueltas como nos sea posible y finalmente esconder los cabos por debajo. Siempre lucirá mejor si optas por un blazer, de forma que tus collares no queden tapados.
Si quieres lograr un estilo boho chic escoge una bufanfa o foulard con rayas o algún estampado llamativo y dóblalo por la mitad. La parte más larga colócala encima de tu pecho recogiendo y atando los cabos en la nuca. La punta del triángulo tiene que quedar mirando hacia abajo, de forma que quede como un delantal.
El estilo clásico da mejores resultados si el pañuelo o foulard es de seda o satinado, dada la ligereza del tejido. En este caso se trata de simplemente, envolver foulard en el cuello dejando que caiga un extremo por la parte delantera y el otro extremo llevarlo a la espalda. Es una forma elegante y atemporal.
Si quieres llevarla de forma simple y a la vez darle ese toque chic que buscas, opta por una bufanda amplia y lisa. Colócala por el cuello con los dos extremos colgando hacia delante. También puedes hacer un nudo o varios atando las puntas de los dos lados.
¿Y qué tal si preferimos llevarlo colgando de nuestro bolso? Se trata de atarlo con un nudo en el asa de esa bolsa de mano tan aburrida y listo, conseguirás darle un toque chic. Además, siempre la tendrás a mano por si necesitas abrigarte.
Imágenes: Pixabay
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Muchas gracias por estas tendencias tan modernas, siguiré visitando la web para encontrar otros artículos interesantes ;)