Tanorexia, adictos al Sol

Aprovechan cualquier escapada al aire libre para tumbarse al Sol como los lagartos y son los mejores clientes de las cabinas de rayos UVA. A esta patología en la que las personas están obsesionadas con el bronceado perfecto, se la conoce con el nombre de tanorexia.

Cada vez con más asiduidad podemos ver que algunas celebrities están más que morenas, la palabra sería «churruscadas», pero detrás de esta obsesión por la belleza se encuentra una enfermedad que se está poniendo muy de moda en la actualidad, la Tanorexia.

Igual que una persona anoréxica puede verse gorda delante de un espejo, o quienes tienen miedo al sol, las personas que padecen tanorexia se ven pálidos y demacrados incluso cuando presentan un bronceado intenso.

Para ellos, lucir un cuerpo moreno se convierte en una prioridad absoluta, una necesidad difícil de satisfacer ya que el tono logrado nunca es suficiente…

Esta enfermedad, propia de la sociedad moderna que nos ha tocado vivir, provoca altas dosis de ansiedad y envejecimiento prematuro de la piel.

Los principales síntomas de la tanorexia son:
♦ Bronceado intenso de la piel, de un tono que excede de lo normal.

♦Líneas de expresión muy marcadas y envejecimiento prematuro de la piel.

♦Competencia con gente cercana por obtener la piel más morena.

♦Situaciones de ansiedad provocadas por la pérdida de  bronceado y frustración crónica por el color de la piel.

♦La conducta de la persona se caracteriza por visitas contínuas a centros de rayos UVA.

Un estudio de la Universidad Wake Forest de Carolina del Norte insiste en que la adicción al bronceado obtiene una sensación de placer, como lo haría una droga. El hecho de exponerse al Sol les propicia un momento de euforia y llegan a liberar opioides por ese estado de bienestar.