Nomofobia, no sin mi smartphone

La nomofobia es la abreviatura de la expresión inglesa ‘no-mobile-phone-phobia‘, este es el nombre que le han puesto los expertos a este nuevo problema psicológico del siglo XXI y que supone un terrible miedo a estar sin el teléfono móvil.

Este pequeño aparatito es un elemento completamente indispensable en el día a día de las personas que padecen nomofobia, porque no solo lo usan para ponerse en contacto con otras personas sino como fuente de información y para jugar, cosa que llega a trastornar la personalidad y que requiere ayuda profesional.

Como dato curioso os cuento que España es el país que tiene más móviles por habitante, es decir que existen en la actualidad cincuenta y seis millones de dispositivos.

Estos datos facilitados por el Centro de Estudios Especializados en Trastornos de Ansiedad (CEETA) también vienen a explicar que los españoles consultan el móvil una media de 34 veces al día y se ha revelado que casi el cincuenta y tres por ciento tiende a sentir ansiedad si no lleva su teléfono encima o se quedan sin cobertura.

El elevado número de dispositivos móviles hace que en España abunden los casos de nomofobia sobretodo en mujeres y adolescentes.

Los síntomas de la nomofobia son los clásicos de los transtornos de ansiedad, como por ejemplo la inestabilidad, la agresividad y las dificultades de concentración. Se suele padecer de malestar general, hipervigilancia, inquietud o temor a estar desconectado y aislado.

Otro síntoma de alarma es que necesites mantener conversaciones por el móvil y que estas te tranquilicen, o que te pases el día comprobando si te ha llegado algún tipo de mensajes, e incluso la visita compulsiva a las diferentes redes sociales.

Para evitar llegar a padecer de nomofobia lo ideal es irse desprendiendo del móvil de forma gradual, además debemos pensar que nuestro comportamiento es fundamental para que nuestros hijos no abusen del móvil.